Lanzamiento Garmin Forerunner 225

Tenemos noticias nuevas de la mano de Garmin que según parece se ha cansado de las cintas pectorales ya que acaba de presentar su primer reloj deportivo con GPS que controla la frecuencia cardíaca directamente desde la muñeca, estamos hablando del Forerunner® 225 todo un primera clase que hará las delicias de todos los runners.

Este dispositivo puede medir el ritmo de nuestro corazón gracias a un avanzado sensor óptico fabricado por la compañía MIO que proyecta luz en la piel y calcula la cantidad de luz devuelta. Dado que existen ligeros cambios mientras la sangre bombea por la muñeca, el sensor detecta estos cambios y emplea un sofisticado proceso de filtrado para determinar la frecuencia cardíaca del usuario. Al mismo tiempo, la junta situada en la parte posterior del reloj impide que penetre la luz externa para, de esta forma, garantizar una detección correcta de los datos de frecuencia cardíaca, (como se lo curran los cerebros de Garmin).

¿Cómo mide tu esfuerzo?

A parte de medir la distancia, ritmo, etc. como hacen los reloj GPS el Forerunner® 225 nos indica nuestro umbral de esfuerzo incorporando  un indicador de distintos colores que determina la zona de frecuencia cardiaca y las pulsaciones por minuto en tiempo real. Así, si está en color gris, significa que el usuario se encuentra en zona de calentamiento (50% de la frecuencia cardiaca máxima); si se detecta en zona azul (60% del máximo), el color verde representa la zona de aeróbic (70% del máximo) mientras, el naranja es el umbral (80% del máximo) y el rojo es la zona de frecuencia cardíaca máxima (comienza al 90%).

De esta manera, el deportista puede plantear su plan de entrenamiento siempre teniendo el control sobre la zona en la que se encuentra y, al mismo tiempo, concentrarse en el esfuerzo que necesita realizar. 

GPS, acelerómetro y monitor de actividad diaria

Además de integrar un GPS que calcula la distancia y el ritmo del deportista, Garmin Forerunner® 225 dispone de un acelerómetro que capta los datos relativos a distancia y ritmo cuando se practica ejercicio en una pista de interior o en una cinta de correr, sin necesidad de añadir un podómetro.

También dispone como viene siendo habitual en los dispositivos Garmin la función de monitor de actividad, puesto que cuenta los pasos y las calorías quemadas a lo largo del día y recuerda al usuario que tiene que moverse tras más de una hora de inactividad. Tan sólo es necesario caminar durante un par de minutos para restablecer el indicador de inactividad del producto. 

Siempre conectado

Esto nos ha gustado mucho ya que no es necesario que conectes el Forerunner® 225 a tu  ordenador para transferir tu actividad Garmin Connect, ya que una vez vinculado con el smartphone, el dispositivo transfiere automáticamente, y siempre que se encuentre en el área de alcance del teléfono, los datos previamente almacenados en el reloj deportivo. 

Finalmente, aunque no es una novedad en Garmin os comentamos que es posible crear sesiones de entrenamiento avanzadas o descargar planes de entrenamiento gratuitos, así como enviarlos al reloj y recibir indicaciones como las que proporcionaría un entrenador. 

Tiene una pinta estupenda, ¿no os parece?.

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